Mi lista de blogs

domingo, 20 de noviembre de 2011

A veces quedarse callado equivale a mentir

He leído recientemente un fragmento de una frase de Unamuno en un suceso ocurrido el 12 de octubre de 1936 en el paraninfo de la universidad de Salamanca 
Él dijo: "A veces quedarse callado equivale a mentir" 
Claro que esto dicho desde mi ordenador, sentada y sin ninguna presión es fácil y bonito…pero esa no era la situación de Unamuno…..ahí esta el valor. 
Las frases no pueden ser bonitas o feas, las frases dichas o escritas deben de llevar compromiso, deben rasgarnos el alma, deben subirnos la adrenalina, deben comprometer nuestra vida, deben de ser vivas…… 
Si no salen del interior, de los tuétanos, son solo eso…… frases que mueren al llegar al punto. Solo frases. 
La situación de Don Miguel era diferente. El se encontró con un grupo de fascistas recalcitrantes, liderados por el general Millán Astray, el fundador de la legión extranjera, asesor oficioso de Franco. 
Presidía el acto Unamuno, el rector de la universidad. Después de unos discursos atacando el nacionalismo vasco y catalán………………….. 
Desde el fondo de la sala alguien gritó el lema de la legión extranjera: "¡Viva la muerte!". Millán Astray dio a continuación los gritos excitadores de multitudes que ahora eran ya habituales: "¡España!", gritó. Automáticamente, una serie de personas gritaron: "¡Una!" "¡España!", volvió a gritar Millán Astray. "¡Grande!", contestó el auditorio. Y al grito final de "¡España!" de Millán Astray, sus seguidores respondieron: "¡Libre!". Varios falangistas, con sus camisas azules, hicieron el saludo fascista ante la fotografía sepia de Franco que colgaba de la pared sobre el estrado. 
Todos los ojos se volvieron hacia Unamuno, cuya antipatía a Millán Astray era conocida, y que, al levantarse para cerrar el acto, dijo: "Estáis esperando a mis palabras. Me conocéis bien y sabéis que soy incapaz de permanecer en silencio. A veces, quedarse callado equivale a mentir. Porque el silencio puede ser interpretado como aquiescencia. …………………… 
Unamuno siguió hablando sin miedo y con la lucidez que le caracterizaba y en ese momento, Millán Astray ya no pudo contenerse por más tiempo. "¡Mueran los intelectuales! –gritó–. ¡Viva la muerte!" Pero Unamuno continuó: "Éste es el templo de la inteligencia. Y yo soy su sumo sacerdote. Estáis profanando su sagrado recinto. Venceréis, porque tenéis sobrada fuerza bruta. Pero no convenceréis. Para convencer hay que persuadir. Y para persuadir necesitaríais algo que os falta: razón y derecho en la lucha. Me parece inútil el pediros que penséis en España. He dicho". 
La tragedia de sus últimos meses fue una expresión natural de la tragedia de España, donde la cultura, la elocuencia y la creatividad estaban siendo reemplazadas por el militarismo, la propaganda y la muerte. Poco después, hubo incluso un campo de concentración para prisioneros republicanos llamado "Unamuno". 
En estos tiempos que corren, ya no se decir muy bien como esta la nación. Creo que sigue habiendo hombres en todo el mundo, y algunos pueden ser hasta dirigentes, porque el poder en muchos de los casos esta reñido con la inteligencia, que sean capaces de decir "mueran los intelectuales" "los negros" "los blancos"……. "los cristianos". Y yo como cristiana cada vez siento más la necesidad de gritar, porque yo también creo que el silencio equivale a mentir. Yo respeto a todo ciudadano de este país sea pobre, rico, homosexual, heterosexual, de derechas, de izquierdas, católico, ateo, musulmán …………. 
Pero como cristiana en este país me siento "ninguneada", porque no solo se nos ignora (que me río yo del apoyo a las minorías, será a las minorías que nos da la gana y que nos interesa), se deniegan permisos para actividades en la calle y se nos dan respuestas que ofenden a la inteligencia, somos muy laicos…….. por eso hacemos procesiones en las calles y sacamos a todos los santos habidos y por haber. 
Que no nos podemos callar, ni debemos, aunque "ninguno" nos oiga ,que el pecado es pecado que las relaciones fuera del matrimonio no son el plan de Dios, ni el adulterio, ni la sodomía, ni el aborto, ni la eutanasia…… y porque he de callarme si esta es mi creencia, si no lucho contra nadie, si no odio a nadie, si respeto por encima de todo al ser humano por el hecho de ser imagen de Dios. Mi lucha no es con violencia pero si con la palabra y tengo el derecho de ser libre porque Dios me ha hecho libre. Mi Dios es real, yo me rindo a Su amor ,solo claudico ante Él y nadie me puede obligar a creer lo que no creo o ha aceptar lo que no acepto. Esto no por un simple capricho, sino por un ideal …. Y mi ideal es Cristo. 
Poniéndonos teatrales, queridos hermanos, "todos a una – como en Fuente ovejuna-", transmitamos un cristianismo puro y verdadero, el que nos trasmitió Cristo, sin cambios humanos, sin sincretismos y vaciedades…………..eso sí …..todo esto con el mejor talante posible, porque a talante no nos gana ni Zapatero.

No hay comentarios:

Publicar un comentario